Sin hacer mucho ruido pero de manera constante, Orlando Magic se ha afianzado en las primeras posiciones de la Conferencia Este. Y todo gracias a un jugador: Paolo Banchero. Quien fuera Rookie del año la pasada temporada está siendo el gran responsable de la asombrosa mejoría de un equipo que el año pasado se quedó en un 41,5% de victorias. Banchero está demostrando en este inicio de campaña que, pese a tener un menor hype que otros de sus compañeros de clase del Draft, ha probado ser un seguro de futuro para su equipo.
Un auténtico veterano con 21 años recién cumplidos, el cual se desenvuelve como si llevase más de un lustro en la liga, capaz de impactar en ambos extremos del campo y, sobre todo, liderar a los suyos.
Si su primera temporada en la NBA ya fue sobresaliente, su año sophomore está resultando ser sublime. Basta echar un vistazo a cómo ha mejorado en cada zona de juego para comprobar la progresión del nativo de Seattle:
| Zona de tiro | % Primera temporada | % Segunda temporada | % de mejora |
| Aro | 62% | 66,4% | +4,4 |
| Pintura | 35,2% | 42,7% | +7,5 |
| Media distancia | 37,6% | 37,2% | -0,4 |
| Triple frontal | 29,4% | 40,3% | +10,9 |
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Su progresión en todos las zonas del juego responde a una evolución notable, la cual, no por esperable es menos reseñable. De hecho, el único espacio donde no ha habido un incremento en positivo, como es la media distancia, el dato es prácticamente idéntico.
Así se puede entender mejor cómo Paolo Banchero está promediando 20,7 puntos con una precisión del 49% en tiros de campo y del 38,9% en triples. Basta echar un vistazo a aquellos jugadores con menos de 22 años que han sido capaces de conseguir semejantes cifras: Chris Webber (1996), Karl-Anthony Towns (2018), John Collins (2020), Shai Gilgeous-Alexander (2021) y Tyrese Haliburton (2023).
Como siempre que se habla de la estrella de Orlando Magic es importante reseñar que se trata de todo menos de un simple anotador. Porque Paolo Banchero es un futuro jugador-sistema. Una figura con el potencial necesario para asumir una alta carga ofensiva y aglutinar todo el juego de ataque a través de sus manos. Aunque tiene mucho camino por recorrer, sus apenas 4,5 asistencias no cuentan toda la historia respecto a su visión de juego.
Sin ir más lejos, Banchero es el jugador de Orlando que más puntos genera en asistencia de todo el equipo con 11,8, siendo de paso el máximo asistente sin ser técnicamente un base.
El jugador de Seattle es una de las historias de esta temporada 2023-2024. Su impacto se puede apreciar desde diferentes prismas.
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A nivel competitivo Orlando ya ha alcanzado en su 23er partido del curso la mitad de las victorias del pasado año, algo donde Banchero ha tenido mucho que ver, al igual que Franz Wagner. Todo ello mientras se convertía en una de las piezas clave de una defensa de élite, la cual ocupa el tercer puesto con un 108,7 de ratio defensivo. Desde el punto de vista individual hay pocos jugadores capaces de impactar en el rendimiento colectivo como Banchero, uno de los 11 en toda la NBA que estén promediando más de 20 puntos, 6 rebotes y 4 asistencias. Una lista en la que se varios candidatos al MVP, sin ir más lejos.
Su presencia en el próximo All-Star Game de Indiana ya parece un seguro, lo cual podría hacer de él el 13er jugador más joven en la historia en recibir ese reconocimiento. La cuestión ahora con Banchero parece más enfocada en si en Orlando Magic podrán ser capaces de rodearle de jugadores que le complementen o que estén a su nivel. Esta cuestión forma parte del futuro, pero de uno no tan lejano si Banchero sigue a este ritmo.
