El partido no siguió el guion previsto en el inicio. Joel Embiid rápidamente se vio inmerso en problemas de faltas que le llevaron rápidamente de vuelta al banquillo. La entrada de Dwight Howard en pista le dio alas a Washington Wizards que aprovechó la baja del mejor jugador rival para ponerse por delante en el marcador. Lo que en 2020 hubiera supuesto una renta insalvable debido a las carencias de Philadelphia 76ers por la falta de referentes ofensivos, en 2021 fue todo lo opuesto. Tobias Harris salió al rescate de los Sixers para completar una actuación memorable que sirvió para poner el 1-0 en la eliminatoria.
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Pero no fue fácil. Philadelphia sufrió de principio a fin para conseguir la victoria frente a los de Scott Brooks, que plantearon un duelo difícil con su característico alto ritmo de juego y forzando a los locales a no poder usar a Embiid del modo que más les hubiera beneficiado. Pese a todo, los de Doc Rivers salieron triunfantes por 125 a 118.
Nuevamente, ante la adversidad ahí estuvo Harris, que completó uno de los mejores partidos de toda su carrera yéndose hasta los 37 puntos en 15 de 29 en tiros de campo, 6 rebotes, 2 asistencias y 2 robos en 37 minutos en cancha. El ala-pivote tomó el balón en los minutos que Embiid estuvo ausente evidenciando una gran toma de decisiones en acciones individuales que le permitió mantener a los suyos en el marcador. Su efectividad en situaciones de 1x1 pudo mantenerse en la segunda mitad para llevar a los Sixers a su primera victoria en Playoffs desde 2019.
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"Yo diría que en los últimos dos o tres meses me he estado preparando para este tipo de momento, preparándome a mí mismo", contó Harris. "Esto es lo esencial, esto son los Playoffs. He estado en esta situación en unas cuantas ocasiones en mi carrera, pero he tomado de cada experiencia como algo que me aporte. Para nosotros como grupo, se trata realmente permanecer mentalmente en los altibajos del juego y estar realmente concentrados en el partido que está sucediendo en este momento. Ese es el mensaje que sigo dándole al equipo, y creo que eso nos ayudará a llegar a donde estamos tratando".
El partido que tuvo Harris debe ponerse en valor junto a la que está siendo su mejor temporada en la NBA en términos generales. Sobre todo teniendo en cuenta de dónde venía tras haber completado una 2019-2020 para el olvido, sin llegar a encajar en el sistema de los Sixers y rindiendo muy por debajo de lo esperado.
"Sé quién soy, conozco mi juego, conozco mis habilidades", relató el jugador de Philly. "Sé una cosa que traigo a este equipo noche tras noche, y es alguien que va a jugar para ganar. Tener un enfoque de hacer lo que sea necesario para que el equipo gane te lleva a tener noches como esta".
Los Playoffs de 2020 fueron uno de los momentos más bajos de la trayectoria de Harris. Carentes de química de vestuario y con Ben Simmons lesionado, Philadelphia tuvo que medirse a Boston Celtics en Primera Ronda, quienes les barrieron en 4 partidos. En el transcurso de la eliminatoria, el ala-pívot llegó a errar 10 triples consecutivos en los 3 primeros duelos, no anotando hasta el definitivo Game 4 donde firmó un 2 de 5.
El desacierto desde la larga distancia no fue lo único que definió su postemporada, promediando un 38% en tiros de campo y tan solo 15,8 puntos de media por encuentro. Tan solo en este Game 1 ante los Wizards Harris ya anotó los mismos triples que en todos los Playoffs anteriores y consiguiendo más de la mitad de los puntos del pasado curso pues logró 63.
Un año después lo sucedido en Disney forma parte del pasado, como los problemas de química de los Sixers que gracias a Doc Rivers se han evaporado. Bajo la dirección del veterano técnico Harris se ha reencontrado consigo mismo, volviendo a ser ese jugador sobrio, fiable y determinante que todo grupo necesita para competir en los Playoffs. "Tengo total fe en Tobias", comentó el entrenador.
"Hizo lo que ha estado haciendo todo el año. Ha estado soportando el peso del equipo y es agresivo con nosotros", dijo Danny Green. "Fue enorme. Cuando estaba en el banquillo, necesitábamos un anotador. Estuvo, en realidad todo el partido, pero especialmente en la primera mitad”, añadió Joel Embiid.
Prácticamente un año después de ser barridos, los 76ers están en disposición de hacer olvidar lo sucedido en la burbuja con un equipo sólido y fiable que podría conducirlos a lo más alto.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
