Seguimos conociendo a los mejores proyectos del NBA Draft 2021 y en este caso pondremos la atención en el reciente Draft Combine, donde varios de estos jugadores salieron a la cancha, no solo realizando diferentes pruebas y mediciones físico-atléticas, sino también disputando cada uno un par de partidos. En esta nueva edición de nuestro scouting del evento, tendremos el foco en tres de los nombres que formaron parte del Equipo 2: Aaron Wiggins, Sam Hauser y Kessler Edwards.
Más | La Guía del NBA Draft 2021
Aaron Wiggins
Wiggins (sin relación con Andrew) es un escolta de 1,96 de estatura y 22 años, que disputó las pasadas tres temporadas de la NCAA con Maryland. Lo mejor de su carrera apareció en la 2020-2021, consolidándose como titular y promediando 14,5 puntos, 5,8 rebotes y 2,5 asistencias en 33 minutos por presentación.
La primera carta de presentación de Wiggins es el tiro exterior. Tomó 5,2 triples por partido en la última temporada y encestó un sólido 36% de ellos. Especialmente certero lanzando a la salida de las cortinas indirectas, algo siempre valorado en los jugadores de rol NBA: lanzó un sensacional 18-38 en esa clase de triples (47%).
Como tirador, Wiggins también tiene algunas limitaciones. Para empezar, es muy certero en catch and shoot, pero no así lanzando desde el drible: 7-30 en la 2020-2021 (23%). Además, todo su juego es bastante irregular y con altibajos, incluyendo sus porcentajes: 41% en su primer año, 32% en el segundo y 36% en el tercero. Su 77% en tiros libres es bueno, pero tampoco de élite. Parece ser más un tirador peligroso, pero no necesariamente un especialista.
Lo interesante de Wiggins es que no solo se trata de un tirador, sino que también es capaz de atacar el aro. Tiene buen físico y potencia para las penetraciones, siendo un buen atleta, aún sin alcanzar niveles súper destacados en términos de explosión. Su manejo también es sólido y mostró buenos porcentajes de definición cercanos al aro, aún sin tener tantos recursos avanzados (no domina la flotadora, por ejemplo). No va a crear con el balón como primera opción, pero tampoco se limita solo al tiro externo.
Wiggins es un proyecto de 3&D y ofrece buenas prestaciones defensivas, con su combinación de altura, brazos largos y potencia. Es bastante dedicado en ese costado y ayuda en diferentes áreas: promedió 7,1 rebotes, 1,4 robos y 0,7 tapones por 40 minutos en la 2020-2021, todos números destacados para un escolta.
Sam Hauser
Sam Hauser es un 3-4 de 2,03 metros y 23 años de edad, con un que pasó por Marquette y Virginia durante cinco años en la NCAA. En la 2020-2021 promedió 16 puntos, 6,8 rebotes y un 42% en triples en 34,2 minutos por presentación.
El perfil de Hauser es uno de los más claros del Draft, con virtudes y defectos que saltan muy claramente a la vista. El oriundo de Wisconsin es uno de los mejores tiradores puros que tiene para ofrecer esta clase 2021 y su consistencia en ese sentido es espectacular: superó el 40% en triples en cada una de sus temporadas NCAA (44% para su carrera). Especialista absoluto, que puede anotar a pie firme, saliendo entre cortinas u ocasionalmente, incluso desde el drible. Todavía más certero en la media distancia (espectacular 60% en dobles largos) y capaz de lanzar por encima de la defensa perimetral, gracias a su estatura. También es automático desde la línea de libres: 90%.
La otra vía de puntos clara de Hauser es el poste bajo. O al menos lo era en la NCAA, donde podía aprovechar su ventaja de centímetros frente a exteriores más bajos. Allí suele recurrir a un disparo en media-vuelta que domina con bastante facilidad, gracias a su toque ideal. Resta por verse si podrá trasladar esta parte de su juego a un nivel de competencia más alto.
El problema de Hauser es que sacando eso, ofrece realmente poco. Rara vez va a crear con el balón en las manos (sacando desde el poste bajo) y carece de la capacidad atlética como para destacarse en la pintura. Es un sólido pasador y no suma pérdidas, pero tampoco le va a generar puntos fáciles a sus compañeros. Está para tirar y generar spacing, no mucho más.
En defensa Hauser va a tener problemas ante rivales de calidad. Tiene buena altura pero posee brazos cortos y sobre todo, no está al nivel NBA en términos atléticos. Jugador pesado y bastante lento, que puede ser superado en velocidad por perimetrales y en potencia por interiores. Si llega a la NBA, probablemente será como un especialista que pueda jugar minutos limitados y en situaciones específicas de necesidad de un tirador.
Kessler Edwards
Edwards es un 3-4 de 2,04 metros de estatura y solo 20 años de edad, que viene de de jugar tres temporadas en Pepperdine. Lo mejor lo dio en la 2020-2021, campaña en la que promedió 17,2 puntos y 6,8 rebotes en 33,9 minutos, además de 1,2 tapones, 1,2 asistencias y 1 robo. En términos de herramientas naturales, muestra buenas condiciones atléticas y tiene brazos largos que le permiten jugar como tuviera algunos centímetros extra.
Más allá de los 17,2 puntos que promedió en Pepperdine, Edwards se proyecta como un jugador de rol, sin tanto potencial anotador. Buena parte de sus conversiones llegan como triplero en catch and shoot. El californiano tomó unos 4 triples por partido en su carrera NCAA, anotando casi el 40% de ellos. Su 88% en tiros libres es otra buena señal en relación a su potencial como tirador. Mecánica extraña pero que parece funcionarle muy bien.
Un déficit muy marcado de juego de Edwards es que no tiene tiro en movimiento. Apenas lanzó 1-8 en triples intentados desde el drible. Tampoco se trata de un jugador capaz de crear en situaciones de pick and roll o aclarados. Sus puntos en la pintura llegan mayormente asistidos por compañeros, corriendo la cancha o tras algún rebote de ataque. Tampoco genera juego con la bola para sus compañeros y registró varias pérdidas más (49) que asistencias (33) en la pasada campaña.
A favor de su aporte en la pintura: es un muy buen definidor. Lanzó un 63% dentro del área restringida.
Lo mejor de su juego y potencial, sin embargo, llega en defensa. Allí no solo tiene una buena combinación de altura, brazos largos y potencia atlética, sino también muy buena energía. Marcador versátil, capaz de combatir en el poste pero también marcar en el perímetro. Buen aporte en tapones, robos y rebotes (sobre todo en el tablero propio). Debe seguir progresando, pero tiene margen para transformarse en un especialista defensivo.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
