Se acerca la noche del 18 de noviembre y nosotros seguimos repasando a los mejores proyectos del baloncesto universitario e internacional elegibles para el Draft 2020 de la NBA. Ahora le llegó el turno de nuestro análisis a Omer Yurtseven, pivote surgido de Georgetown.
¿Quién es y cómo juega Yurtseven? Lo analizamos a continuación.
Más | La Guía del NBA Draft 2020: cómo funciona, jugadores disponibles, mejores proyectos y más
Información personal
Omer Yurtseven es un pivote de 2,13 metros y 120 kilogramos, nacido el 19 de junio de 1998 en Estambul, Turquía. Yurtseven fue considerado un prodigio del básquet europeo desde temprana edad y se sumó a North Carolina State para la temporada 2016-2017 de la NCAA.
Más | NBA Mock Draft 2020: ¿El número uno será para Anthony Edwards o para LaMelo Ball?
Su primer año allí no fue el mejor: 5,9 puntos y 4,4 rebotes en 18,9 minutos. La 2017-2018 lo vio con números muy superiores (13,5 puntos y 6,7 rebotes), aunque al finalizar la misma decidió transferirse a Georgetown. Tras un año alejado de las canchas de acuerdo a las reglas de la competencia, regresó para la 2019-2020, en la que tuvo una media de 15,5 puntos y 9,8 rebotes.
Fortalezas
Yurtseven fue un gran jugador ofensivo en la NCAA, tal como lo marcan sus 22,7 puntos por cada 40 minutos en cancha desde el 2018 a la fecha, sumado a su 55,3% de campo y 43,1% en triples. Combina altura, recursos y un gran toque.
El turco fue quizá el mejor anotador de poste bajo de la última temporada universitaria, siendo capaz de ganar posesión con facilidad gracias a su tamaño y luego recurriendo a todo tipo de movimientos para anotar. Tuvo una enorme eficacia de cancha en esas acciones.
Su toque alrededor de la pintura es excelente. Destacado nivel técnico, sobre todo para un pivote de 2,13 metros.
A su vez también mostró la habilidad para anotar dobles largos y como dijimos, totalizó un 43% en triples en las últimas dos campañas, aunque en pocos intentos (1,6 por cada 40 minutos). Es importante que siga potenciando esta parte de su repertorio y extienda su alcance hasta el perímetro NBA.
Lanzó un 75% en tiros libres en la 2019-2020.
Defensivamente es capaz de hacer sentir su presencia en la pintura, protegiendo el aro: dio 2,6 tapas por 40 minutos en las últimas dos temporadas.
Excelente rebotero en ambos costados del campo. Sus 9,8 rebotes en 27,3 minutos de la 2019-2020 fueron una de las mejores marcas de la competencia.
Debilidades
El principal limitante de Yurtseven es la falta de capacidad atlética. Tiene buena movilidad para alguien de su tamaño, pero está lejos de ser un jugador explosivo o ágil.
En ofensiva su juego no encaja demasiado con lo que se busca en la NBA hoy en día: depende demasiado de recibir de espaldas al aro. Debe consolidar su tiro a media y larga distancia, aunque tiene una mecánica algo lenta, que hace que necesite espacio para ser efectivo. No se proyecta como un especialista, a pesar de sus buenos porcentajes.
Más preocupante es lo poco que aportó como pasador. Normalmente, jugadores con los recursos de Yurtseven en el poste bajo tienen una buena visión de cancha. Sin embargo, no es el caso del turco, que fue susceptible a las doble marcas y apenas promedió 1,5 asistencias por 40 minutos en su carrera NCAA. En la 2019-2020 sumó casi el doble de pérdidas (59) que de asistencias (31).
De todas maneras, los mayores inconvenientes los tendrá en defensa, donde carece de versatilidad. Juega con buena dedicación en este costado y hace el esfuerzo de marcar fuera de la pintura, pero sencillamente carece de la velocidad para ser efectivo. Va a sufrir frente a cualquier rival con cierta habilidad para atacarlo desde el drible. Limitado a proteger el aro y no mucho más.
Posición de Draft proyectada: 2° Ronda.
Comparación NBA: Boban Marjanovic de 2,13.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
