El triple es principio y fin en la NBA actual. Supone la llave del éxito y, al mismo tiempo, un candado al mismo. Raro es el caso en el que a día de hoy un equipo puede alcanzar las más altas cotas sin contar con un elenco de especialistas más allá del arco. Tanto, que las excepciones confirman la regla. Una de esas han sido los Milwaukee Bucks, el único conjunto capaz de coronarse como campeón en las últimas cinco temporadas con un porcentaje inferior al 34,5%, haciéndolo en 2021 con una media del 32,1%. Para poner en contexto, ese fue el dato más bajo de un ganador desde los Detroit Pistons de 2004 (30,4%).
Como es lógico, las mejores versiones de los hombres de Giannis Antetokounmpo han venido cuando han estado inspirados desde la larga distancia, fluyendo, encontrando ocasiones liberadas e imponiendo su superioridad. Sin ir más lejos, en las Finales de 2021 alcanzaron el 35,8% de precisión exterior, nada mal.
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Para los Bucks la irregularidad al triple es su gran seña de identidad, la cual han aprendido a gestionar con cierta destreza, pero en estos Playoffs de 2023 corren un riesgo bastante alto de que les pase factura. Y la razón reside en su oponente, Miami Heat.
En el caso de Milwaukee hay una relación directamente proporcional entre la derrota y una actuación nefasta en el tiro exterior. En la era Mike Budenholzer los Bucks han perdido tres series de Playoffs: en 2019 ante Toronto, en 2020 frente a Miami y en 2022 a manos de Boston. En estas tres caídas su mejor registro no superó el 32%:
Año | Rival | %3PT |
---|---|---|
2019 | Toronto Raptors | 31% |
2020 | Miami Heat | 32,7% |
2022 | Boston Celtics | 27,9% |
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Si bien en postemporada es más complejo disfrutar de aciertos paralelos a los de Fase Regular o imponer con mayor comodidad el estilo propio, la mayor deficiencia de los Bucks de Budenholzer es esta, el triple:
- Acierto exterior en series ganadas (8): 34,6%
- Acierto exterior en series perdidas (3): 30,5%
Erik Spoelstra es uno de los mejores entrenadores de la NBA porque sabe muy bien cómo incidir en las deficiencias de oponente. Basta echar un vistazo a cómo en sus enfrentamientos con Milwaukee ha expuesto los problemas de estos para anotar desde lejos, incluso pese a la derrota (32,7% en 2021). Y en este 2023 la cosa parece seguir un guion similar.
24,4%. Ese fue el porcentaje de acierto de los Bucks en el primer partido de los presentes Playoffs ante Miami Heat, en una devastadora serie de 11 de 45. Un dato que se convirtió en la octava peor marca exterior para un encuentro de postemporada con un mínimo de 40 lanzamientos.
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¿Cómo lo hicieron desde Miami? A base de concentrar todos sus esfuerzos en proteger la pintura, construyendo un muro infranqueable para Giannis (hasta la lesión), incluso a riesgo de permitir tiros liberados al resto de Milwaukee:
Esta no es la estrategia más revolucionaria de la historia del juego. Ni siquiera es algo novedoso, pero sí puede ser la única opción de la cual dispone Miami Heat para dar la sorpresa y llevarse la eliminatoria. A mayor volumen más riesgo de que un rival te castigue por tomar ese camino. Sin embargo, Spoelstra tiene la convicción de que al incrementar los intentos rivales desde el triple los bajos porcentajes les beneficiarán.
"Ahora mismo se trata de ganar por cualquier medio que sea necesario", reconoció Spoelstra tras la victoria en el primer partido.
De todos los escenarios posibles solo hay uno en el cual Miami Heat pueda salir vencedor y ese es explotando la mayor deficiencia de Milwaukee Bucks como es el triple.
Las opiniones aquí expresadas no representan necesariamente a la NBA o a sus organizaciones.