Hace tiempo que los Memphis Grizzlies dejaron de ser una sorpresa al mirar la clasificación y se convirtieron en un legítimo contendiente al título. Las razones son varias, pero entre todas destaca una en concreto: son un equipo unido. Esa afirmación, lejos de ser una evidencia, esconde una realidad pues ser un equipo es un estado que se alcanza, un objetivo que lograr y que resulta muy difícil mantener. Basta un pequeño revés para que el castillo de naipes se venga abajo pero cuando este resiste podrá aguantar todo lo que venga en el futuro.
Desde que en 2019 Taylor Jenkins asumiera el control del conjunto como entrenador jefe la imagen de la franquicia ha cambiado completamente, hasta el punto de convertirse en un ejemplo para muchas otras franquicias. Algo que tiene que ver con su manera de elegir y desarrollar el talento a cómo estructuran su juego, los Grizzlies están poniendo las bases de un nuevo modelo cuya meta no es otra que alcanzar el éxito y hacerlo con los jugadores que ellos mismos seleccionaron y en los que confiaron.
MÁS | NBA All-Star 2023: LeBron James y Kevin Durant, siguen como líderes entre los jugadores con más votos
Mientras la mayoría de franquicias inician el mes de enero pensando en qué traspasos deberían hacer para mejorar su plantel e incrementar sus opciones de ganar, en Memphis reina la calma. Y lo hace porque tienen todo lo necesario para cumplir sus objetivos e intentar ir un poco más allá respecto al curso pasado.
Los equipos en crecimiento como son los Grizzlies, los cuales se definen por lo que sus jóvenes puedan realizar y cómo de lejos puedan llevar su propio techo, corren el riesgo de caer en la trampa del progreso constante. Es decir, que si año tras año han ido un poco más lejos, en el momento que esta progresión ascendente se detenga todo se pondrá en cuestión. Por ello, en Tennessee están tratando de darles a sus jugadores la dirección correcta para evitar que esto se produzca.
¿Y cómo lo están haciendo? Construyendo un sistema defensivo impenetrable e impulsados por un sensacional Ja Morant.
Vota ahora a tus titulares favoritos para el All-Star Game: España | México | Argentina
La defensa, el pilar del éxito de los Grizzlies
En el pasado los Grizzlies habían contado con un firme candidato al Jugador defensivo del Año como era Jaren Jackson Jr, al que se le unían otros complementos que aportaban esfuerzo y acciones positivas. Sin embargo, todo eso resultó insuficiente. Era necesario dar forma a un sistema más completo y que involucrase a todo el quinteto sobre la cancha para que pudiese mantenerse en ausencia de JJJ.
Aquí ha habido un nombre que ha dado un paso adelante significativo en esta temporada 2022-2023 como ha sido Dillon Brooks. Según BBall Index, el canadiense se ha encargado de defender al mejor jugador rival todas las noches, ocupando el percentil 99 en lo que a dificultad de emparejamiento se refiere. Eso significa que partido tras partido se mide a la estrella rival y lo hace de un modo impecable.
El impacto de Brooks no tiene tanto que ver con bajar el porcentaje de acierto de su par como de impedirle estar cómodo y, en consecuencia, que le cueste tener opciones viables de tiro.
Por ejemplo, a Anthony Edwards le dejó en 20 puntos en 87 posesiones defensivas, a Kevin Durant en 10 tantos en 68 acciones y a Zion Williamson en 6 puntos en 51 secuencias.
Precisamente contra la estrella de los Pelicans tuvo su mejor partido defensivo en mucho tiempo:
Más allá del trabajo individual de Brooks o de otros miembros como Brandon Clarke, John Konchar o Steven Adams, lo que sostiene todo es un entramado de ayudas cuyo objetivo último es proteger la pintura. Los Grizzlies son el sueño de cualquier entrenador defensivo pues se comunican, rotan y llegan a cubrir todas las potenciales fallas que se dan en el transcurso de una posesión.
Memphis es el tercer equipo que menos puntos permite a sus rivales en la pintura por cada 100 posesiones (46,2), prácticamente empatados con Heat (45,4) y Knicks (45,1).
La traducción de esto se refleja en el rendimiento general del grupo cuando se proyecta la defensa a la media cancha. Según Cleaning The Glass los de Taylor Jenkins son la mejor defensa en el momento que el juego se ralentiza, pues conceden únicamente 92,1 puntos por cada 100 acciones. Tal es su impacto que la distancia entre el segundo (Brooklyn Nets, 93,6) es la misma que entre este y el octavo clasificado (Cleveland Cavaliers, 95,6).
Los Grizzlies son un muro infranqueable atrás. Un rival durísimo que solo tiene que pulir su rendimiento en el clutch para ser perfectos defensivamente hablando.
Ja Morant, el superhéroe de los Grizzlies
Allá donde la defensa no llega Ja Morant lo hace. El joven de tan solo 23 años ha aprendido de los errores que condenaron a los Grizzlies a la eliminación en los pasados Playoffs para seguir su particular evolución. Su principal defecto sigue siendo la defensa, donde todavía tiene un largo camino por recorrer, aunque está dando los pasos adecuados en ese sentido. Más allá de ese costado del campo, una de las limitaciones que el base se encontró en su segunda experiencia en la postemporada fue la dificultad para trasladar su estilo de juego.
Morant dependía mucho (y sigue haciéndolo) de sus incursiones "suicidas" hacia el aro, las cuales le reportan un buen botín de puntos partido a partido. La cuestión fundamental de su cambio reside en el hecho de que se está alejando lentamente de la canasta y comenzando a desarrollar un tiro en suspensión a tener en cuenta.
Los datos así lo reflejan:
Temporada | Tiros en suspensión por partido | % de acierto |
---|---|---|
2020-2021 | 4,2 | 34,8% |
2021-2022 | 6,3 | 36,9% |
2022-2023 | 7,9 | 40% |
Su velocidad de desborde sobre bote o dribble le permiten ganar el espacio suficiente para intentar un lanzamiento en movimiento, pero conseguir unirlo a una técnica individual y una coordinación de su cuerpo correcta no es nada sencillo. Pese a todo Morant está creciendo gracias a acciones como estas donde ejecuta un tiro en la media distancia corta, el cual realiza tanto en suspensión como a través de floaters.
En el momento que Ja Morant ralentice ligeramente su juego, lo cual le abrirá un abanico infinito de posibilidades a nivel ofensivo, pudiendo jugar a diferentes velocidades, la estrella llevará a los Grizzlies a un nivel todavía por descubrir.
Lo más positivo es que está dando los pasos adecuados para llegar ahí.
Las opiniones aquí expresadas no representan necesariamente a la NBA o a sus organizaciones.