Que Luka Doncic es un talento generacional es una obviedad tan grande como que el agua moja. Sin embargo, convertir y traducir sus habilidades en un equipo ganador no es una ecuación tan fácil de resolver. Los Dallas Mavericks llevan tiempo probando diferentes fórmulas que han tenido resultados mixtos. De Dennis Smith Jr a Kristaps Porzingis hasta llegar a Christian Wood, los texanos todavía siguen buscando al complemento y el modo adecuado de sacar el máximo potencial de la estrella eslovena.
Los últimos meses no han sido nada fáciles para la gerencia de los Mavs. La decisión de Jalen Brunson de no renovar con ellos y poner rumbo a Nueva York les dejó en una posición complicada y sin margen de maniobra. Al irse sin recibir nada a cambio el potencial espacio salarial que debería haber ocupado se perdió, y con él las posibilidades de añadir talento a través del mercado.
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Dallas tiene la necesidad de mejorar su actual rotación y cuanto antes sea posible. El nivel de Luka Doncic no puede ser mejor dadas las circunstancias, asumiendo cerca del 37% del uso ofensivo del equipo. Un dato que, de terminar hoy la temporada, sería el 10º más alto de todos los tiempos. El ex del Real Madrid pronto empezará a notar las consecuencias de este desgaste físico, lo que repercutirá en el rendimiento de unos Mavs que ya están sufriendo.
Los de Jason Kidd deben encontrar la manera de ayudar a Luka Doncic sobre la cancha, no solo con más talento que le descargue de peso ofensivo, también en otras facetas que mejoren al grupo. Es momento de buscar 3 claves a las que los Dallas Mavericks deberían atender.
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Más tiradores de confianza
La mejor fórmula para explotar un talento del calibre de Luka Doncic, cuyo juego se maximiza a través de un sistema que priorice el dividir y doblar, son los tiradores exteriores. Al acompañar al esloveno de figuras capaces de recibir y tirar desde largas latitudes con altos porcentajes se consigue un ataque eficiente y rápido.
Dallas Mavericks, en cierto modo, tiene con figuras que cumplen con estos requisitos objetivos como Tim Hardaway, Dorian Finney-Smith o Reggie Bullock. El problema es que ninguno de ellos está lanzando por encima del 35% de acierto pese a combinarse para 16,6 intentos por noche.
Si esto no fuese suficiente, aquellos llamados a ejecutar este rol también se les exige que aporten en defensa y que sean muy importantes además. Una función que, salvo Finney-Smith, ninguno de los otros dos mencionados está realizando del modo esperado.
¿Qué opciones tiene el equipo texano para rodear a Doncic de jugadores que le ayuden en este sentido? Una posibilidad sería Malik Beasley (15M$), quien está lanzando al 42,2% en triples en recepción, aunque permitiendo un 49% del acierto a sus rivales en defensa. Utah Jazz pronto empezará a mirar al mercado de traspasos y el joven escolta sería una pieza interesante si encontrasen el modo de hacer cuadrar los salarios y las potenciales rondas de Draft involucradas.
Un cuatro que mueva a Wood al puesto de cinco
Menos de dos meses de temporada han sido suficientes para comprobar el fracaso que ha resultado ser JaVale McGee. A sus 35 años el veterano no está en condiciones de seguir siendo titular en un conjunto con ciertas aspiraciones. Su aporte en defensa es nulo y en ataque está tan limitado como siempre. El error de firmar a McGee ha obligado a Jason Kidd a devolver a la rotación habitual a Maxi Kleber y Dwight Powell, retornando a los clásicos y teniendo los mismos problemas de antaño.
Por otro lado está la cuestión de Christian Wood, una figura con unas condiciones físicas envidiables que aun no le han dado el rol adecuado para poder explotar todo su potencial. Una vía para conseguirlo sería desplazarle al puesto de cinco, lo que obligaría a los Mavs a encontrar un cuatro que supliera su papel en el quinteto inicial.
El contar con Wood como interior de referencia daría mucho más dinamismo al ataque de Dallas, abriendo espacios a Doncic y poniendo en problemas a los oponentes en su posición al jugar este más por fuera.
¿Y qué opciones hay en el mercado? Nuevamente hay que mirar a Salt Lake City pues ahí se encuentra un Rudy Gay que podría ser extremadamente útil para los intereses de los Mavs. El veterano ha sido desplazado en los últimos años a un rol más próximo al de interior undersized, alternando el puesto de tres, cuatro y cinco. Si bien no es un especialista desde la larga distancia ni tiene la explosividad defensiva del pasado es un veterano contrastado que daría justo lo que Dallas necesita.
Un base suplente capaz de anotar
El trío formado por Doncic, Dinwiddie y Brunson era perfecto porque permitía tener siempre a uno de los tres en el banquillo descansando o esperando su momento. Así se explica cómo los Mavs fueron capaces de alcanzar las Finales de Conferencia la pasada temporada. La marcha del último desestabilizó las rotaciones y ha expuesto los problemas de Dallas pues ha movido a Dinwiddie al quinteto titular sin reemplazo natural detrás. La segunda consecuencia de esto ha sido un aumento considerable de los minutos del esloveno, pasando de 35 a 37 por encuentro.
Es justo reconocer que en la segunda unidad los de Jason Kidd no cuentan con un base suplente o manejador secundario que pueda asumir la responsabilidad de acompañar a Doncic o Dinwiddie. Frank Ntilikina no tiene la confianza de Kidd para hacerlo. Facundo Campazzo, cortado el lunes 28 de noviembre, está demasiado limitado y no ha demostrado poder realizar un rol de ejecutor en condiciones (32% en triples en recepción la temporada pasada). Por último, Jaden Hardy tiene el talento suficiente para encajar, pero todavía está muy verde y no cuenta con la experiencia para ello.
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Más allá del mencionado Malik Beasley, quien podría encajar también en esta categoría, Will Barton de los Wizards, o Coby White de los Bulls, serían figuras con capacidades y salarios asumibles por los Mavs.
De hecho, la decisión de firmar a Kemba Walker como agente libre sirve para comprobar el estado de nerviosismo de la gerencia de Dallas. Un base veterano y con experiencia, sí, pero cuyos problemas físicos y defensivos casi pesan más que los puntos que pueda sumar en la segunda unidad.
Para que Dallas pueda realizar cualquier movimiento habrá que esperar al 15 de diciembre, la fecha oficiosa de inicio del periodo de traspasos.
Las opiniones aquí expresadas no representan necesariamente a la NBA o a sus organizaciones.
