Pocos jugadores poseen la capacidad de anotar de Devin Booker y así lo demostró en la victoria por 132 a 113 contra Chicago Bulls. Al primer cuarto terminó con 9 puntos, pero pronto empezó a sentirse más cómodo. Se fue al descanso con 25 tantos, fallando apenas 4 tiros de campo. En los 12 minutos siguientes el escolta firmaría un cuarto escandaloso, añadiendo 26 más para elevar la cifra 51 puntos. Todo ello en tan solo 20 de 25 intentos y con una serie de 5 de 6 al tiro libre.
Booker culminó una de las grandes noches de su carrera, colocándola a la misma altura de los 70 que logró contra Boston Celtics en 2017. El escolta de los Phoenix Suns estuvo intratable y la defensa de Chicago no tuvo nada que hacer para deternerle, tan solo rezar para que los balones no entrasen por el aro.
🔥 ¡ECHA FUEGO!
— 𝐓𝐡𝐞 𝐒𝐩𝐨𝐫𝐭𝐢𝐧𝐠 𝐍𝐞𝐰𝐬 España 🇪🇸 (@sportingnewses) December 1, 2022
Devin Booker lleva 51 puntos ¡y todavía no ha empezado el último cuarto! pic.twitter.com/G9F6DHi4ef
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Una noche tan especial como irrepetible pues según ESPN Stats Booker es el segundo jugador en los últimos 25 años en lograr una anotación semejante con un 80% de precisión en 3 cuartos. La figura de Phoenix se unió de este modo a James Harden, quien realizó lo propio el 5 de noviembre de 2017.
En términos generales, sus 51 tantos con un 80% de acierto en tiros de campo suponen la cuarta ocasión en la historia de la NBA en la que un guard consigue un partido de este tipo. Booker se une así a Dana Barros en 1995 (50 puntos, 80,8%), Kyrie Irving en 2020 (54, 82,6%), Michael Jordan en 1988 (52, 82,8%) y Jamal Murray (50, 84%).
Todo ello con un mínimo de 25 lanzamientos intentados:
Menos tiros de campo necesarios para llegar a 50 puntos (y menos de 7 tiros libres intentados)
— Sergio Rabinal (@S_Rabinal) December 1, 2022
1 - 25: DEVIN BOOKER (hoy) y Jamal Murray (2021)
2 - 26: Dana Barros (1995)
3 - 27: Stephen Curry (2016)pic.twitter.com/UsMthjjKTv
Lo único que quedó en el aire fue saber de lo que habría sido capaz la figura de los Suns si hubiera saltado al campo en el último asalto. Monty Williams decidió no forzar innecesariamente a su estrella y esta quedó sentada en el banquillo durante los 12 minutos finales.
Con este triunfo los de Arizona se reafirman como líderes del Oeste con una marca de 15-6 y 6 victorias consecutivas.
Las opiniones aquí expresadas no representan necesariamente a la NBA o a sus organizaciones.