Durante años se asentó un discurso en relación a Luka Doncic muy concreto, el cual venía a decir que lo único que el esloveno necesitaba era otra estrella a su lado. Con la mera presencia de este astro todos los problemas se desvanecerían. A mayor talento en el equipo menor dependencia del ex del Real Madrid. Casi parecían los pasos a seguir en una receta culinaria. De este modo, cuando los Dallas Mavericks tuvieron a su alcance la posibilidad de hacerse con Kyrie Irving, estos no dudaron un solo instante. Fin al problema, pensaron. Nada más lejos de la realidad.
Con y sin Luka. Con y sin Kyrie. Juntos y separados. Los problemas de los Mavs siguen ahí y no parece que vayan a poder encontrar una solución a menos de un mes para que finalice la Fase Regular.
Lo único que puede consolar (que no calmar) a los fans del equipo es que de la apretada situación que existe en la Conferencia Oeste puede suceder cualquier cosa. A 27 días para que llegue a su fin esta campaña y se inicie la postemporada hay únicamente una diferencia de 2,5 partidos entre el quinto y el duodécimo. Una mala semana puede hacer bajar a un equipo de la zona de Playoffs a casi los puestos de lotería del Draft. Una bendición y, a la vez, una condena.
MÁS | La lesión de Luka Doncic: qué tiene, qué se sabe y cuándo podría volver con Dallas Mavericks
Dallas se encuentra en una posición difícil e incómoda. Para cumplir con la profecía que vaticinaba que traer una estrella a Doncic pondría a los Mavs en el mapa la franquicia tuvo que desprenderse de sus preciados jugadores de rol. Algo que, en cierta medida, rompió el equilibrio reinante en el plantel dirigido por Jason Kidd pero cuya recompensa parecía merecer la pena.
Desde que realizaron dicho movimiento el balance de los Mavs es de 6 victorias por 8 derrotas, de las cuales ambos han jugado simultáneamente en 9 de ellos (3-6 de marca) y este ha sido el rendimiento de Luka y Kyrie hasta la fecha:
Minutos | Ratio ofensivo | Ratio defensivo | Net Rating | |
---|---|---|---|---|
Irving y Doncic en cancha | 232 | 122,6 | 115,8 | +6,7 |
Doncic en cancha, Irving fuera | 86 | 107,5 | 131,3 | -23,8 |
Irving en cancha, Doncic fuera | 112 | 134,5 | 123,6 | +10,8 |
Suscríbete a NBA League Pass para ver todos los partidos: Estados Unidos | Resto del mundo
La lectura a vuela pluma de estos números indica que sí, en efecto, Irving ha puesto solución a aquellos tramos en los que Doncic no estaba presente (en torno a 11 por noche) a cambio de ser peores en los que juega sin Kyrie (unos 10 por partido).
¿A qué se debe esto entonces?
La respuesta se encuentra en la propia rotación de Jason Kidd. El entrenador de los Mavs ha recuperado para la ocasión a Frank Ntilikina con la idea de que ayude defensivamente al grupo, pero los resultados no han sido muy positivos. En las dos alineaciones principales sin Irving pero con Doncic en las que ha estado el francés el resultado ha sido de -0,9 de net rating y -57,1. Por otro lado, un Justin Holiday que ha cumplido con su fama de jugador inconsistente, dejando en sus quintetos con el esloveno +6,3, -46,2 y -57,1.
La pérdida de Spencer Dinwiddie y Dorian Finney-Smith, los dos jugadores que más minutos jugaban en Dallas después de Doncic, ha hecho que el empuje del equipo y, sobre todo, su consistencia se vean afectadas. A cambio, los texanos han ganado punch de la mano de un Kyrie que promedia 27,5 puntos y 6,6 asistencias con una precisión del 41,4% en triples y 58,1% de dos.
MÁS | ¿Quiénes son los mejores tiradores NBA en la temporada 2022-2023? Los especialistas en el triple
Sin embargo hay otra cuestión que va más allá de las consecuencias de una decisión deportiva tomada desde los despachos. La cual todavía no tiene una respuesta clara consumido el 82% de la temporada regular del equipo. ¿Cuál es el problema de Jason Kidd con Christian Wood?
Tanto juntos como por separado los números del interior con la estrella eslovena han sido positivos, quizá cuestionables a nivel defensivo, pero no tanto si se tiene en cuenta que los Mavs son 23º en eficiencia. Y, aun así, desde la adquisición de Irving, Wood ha sido el 7º que más ha jugado sin causar baja ninguna sola noche. El jugador que venía a solucionar buena parte de los problemas que tenía esa posición en Dallas ha visto reducido su tiempo de juego por debajo de los 20 minutos. Una situación que lleva siendo inexplicable desde que comenzó la temporada. Tanto, que incluso en el último compromiso de los Mavs donde no estuvieron sus dos estrellas, Wood se quedó en 15 minutos de juego.
Aficionados en Estados Unidos, pueden ver los mejores partidos de la temporada 2022-2023 de la NBA en Sling TV. Regístrate haciendo click aquí.
Preguntado al respecto, Kidd ha despachado el tema haciendo alusión a la gran cantidad de interiores de los que disponen y la dificultad que entraña eso para que el reparto sea equitativo.
“Si miras la profundidad que tenemos estamos tratando que salgan a jugar y ver quién tiene la mano caliente, y en este momento, con Maxi (Kleber) de regreso, eso va a cortar algo de sus minutos [de Wood], especialmente cuando estamos sanos. Y, entonces, así es como es ahora, y puede cambiar a medida que avanzamos”, dijo Kidd.
Más allá de esto, la realidad para los Mavericks no invita al optimismo. Con 14 encuentros por delante deberán encontrar la manera de funcionar con lo que tienen. Todo ello en un momento en el que Luka Doncic está lejos de sentirse bien físicamente, pues arrastra una lesión muscular que le mantendrá fuera indefinidamente. Aunque sobre el papel tienen uno de los calendarios más asequibles de la liga, su realidad es bien distinta. Tan solo los 2 compromisos ante Spurs y los otros 2 frente a los Hornets ofrecerán una oportunidad de medirse a un rival que no tiene ya nada en juego. Esto se debe a que 5 serán con equipos en la batalla por el Play-In y los otros 5 con rivales en peleas por posiciones de cara al orden de Playoffs.
Unos Mavs que no han sido ni brillantes en defensa ni constantes en líneas generales afrontan la recta decisiva de su temporada con el reto de entenderse y salir del agujero del Play-In lo antes posible para evitar el fracaso.
Los problemas que había antes del traspaso de Kyrie Irving siguen ahí si no se han visto magnificados. Y quizá ya es tarde para que el parche de una estrella sea suficiente.
Las opiniones aquí expresadas no representan necesariamente a la NBA o a sus organizaciones.