Un día como hoy en la NBA pero de 2007 un tal Kobe Bryant comenzó una de sus rachas individuales más asombrosas y todavía inigualables desde que la estrella de Los Angeles Lakers lo consiguiese. Y es que el escolta despertó ante Portland Trail Blazers su instinto más devastador en lo ofensivo, sumando 65 tantos e iniciando una racha de cuatro partidos consecutivos alcanzando los 50 puntos como mínimo, superando así la anterior marca de Michael Jordan (3 en 1987) y colándose entre el extraterrestre Wilt Chamberlain, quien posee las cuatro mejores marcas en ese sentido de toda la historia.
Los Blazers fueron siempre uno de los equipos fetiche de Kobe, un rival que siempre le puso las cosas complicadas y que le exigió el máximo en cada noche. De las Finales de Conferencia Oeste en el año 2000 hasta su última gran noche ante ellos en 2013. En 26 ocasiones la leyenda del equipo angelino superó la barrera de los 30 puntos y en 6 de ellas la de los 40, una capacidad anotadora con la que los hizo temblar noche tras noche.
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La temporada 2006-07 supuso para Bryant una continuación dentro de su odisea personal en la franquicia californiana. Un equipo cuyos escuderos seguían siendo Kwame Brown o Smush Parker se mantenía en puestos de Playoff gracias al empuje del mejor Kobe de toda su carrera. Tras firmar su máximo de anotación el curso anterior con 35.4, el escolta no dejó escapar su momentum y alargó esa racha con 31,6 en el curso siguiente a lo que sumó el MVP del All-Star Game. Todo esto no sirvió a la estrella para alzarse con su primer galardón al Jugador Más Valioso, ya que cayó en manos de Dirk Nowitzki y su gran año con los Mavs.
El partido de aquel 16 de marzo en el Staples Center fue una demostración de poderío ante el incipiente rookie Brandon Roy, fiel seguidor de Bryant, y que progresivamente empezaba a despuntar en unos Blazers en reconstrucción. Desde que el balón alzó vuelo ese viernes por la noche se vio que Kobe quería dejar su impronta, que tenía la mirada de realizar una noche épica y, en esas ocasiones, poco o nada podía hacerse. Dos robos casi consecutivos en el primer cuarto parecían intuir un gran parcial de inicio local, pero 11 puntos de Zach Randolph dejaron a los Lakers y a su estrella contra las cuerdas (24-16 al primer cuarto).
Fue en ese momento en donde Black Mamba hizo su aparición definitiva, siendo capaz de sumar 19 puntos en el segundo asalto en una demostración de dominio de la media distancia sin igual. Bryant entró en trance y las acciones se repetían una tras otra: balón al 24, sucesión infinita de piques y un lanzamiento imposible que siempre besaba el aro. Él solo consiguió darle la vuelta al encuentro (43-46), pero todavía quedaba mucha tela que cortar. Así, los visitantes reaccionarían de la mano de Aldridge y Roy para frenar el empuje de los Lakers y comenzar así un intercambio de canastas donde Bryant sería el verdadero protagonista con un monólogo épico.
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Si el rendimiento de Kobe en el segundo cuarto había sido clave, el que firmó en el último asalto no se quedó atrás al conseguir 24 de los 30 tantos que anotaron los Lakers. No había manera de frenar a la Mamba en las medias distancias, cada pick&roll se traducía en un lanzamiento en la media distancia y este era capaz de penalizar cada defensa múltiple consiguiendo sacar la falta, encontrando el hueco entre la marabunta y sin cegar en su intento por alzarse con el triunfo.
Con 20 segundos para el final y posesión para los angelinos, Bryant consiguió recibir y zafarse de la defensa de Roy y Randolph para elevarse en un lanzamiento exterior punteado con el que empató el encuentro mandándolo a la prórroga.
Un tiempo extra donde el escolta gastó sus últimas balas y puso en práctica algunos movimientos irrepetibles que pusieron en pie a todo el estadio y que dejaron sin argumentos a unos Blazers que dieron todo y más para tumbar al mito. Los Lakers se impondrían en la prórroga gracias a 9 puntos de Kobe para vencer por 116 a 111 en una noche donde este acabaría con 65 puntos, 7 rebotes y 3 robos con un 59% en tiros de campo y un 66% en triples (8 anotados). Unos guarismos que le hicieron ser durante mucho tiempo el único jugador en firmar una noche de semejante volumen anotador y de acierto, siendo igualado más tarde por LeBron James (2014), Klay Thompson (2016) y James Harden (2019).
Una noche épica
Ese 16 de marzo de 2007 fue el punto de partida a una de las rachas más memorables de anotación de la historia reciente de la NBA. En una competición donde el nombre de Wilt Chamberlain está presente en casi todos los récords individuales y grandes registros, que Kobe Bryant fuese capaz de emular al mito en un momento de auge del talento individual y colectivo y donde la liga empezaba de nuevo a abrirse al triple pone en valor la importancia de una figura como la de los Lakers.
El duelo ante los Blazers despertó un lapso de 13 días en los que anotaría 50 puntos o más, cuatro partidos al mejor nivel anotador donde promedió 56,3 tantos con un 54% en tiros de campo y un 51% en triples, todo ello con cuatro victorias. Así fueron sus partidos:
| Fecha | Puntos | %TC | %T3 | %TL |
| 16 de marzo de 2007 | 65 | 59% | 66% | 91% |
| 18 de marzo de 2007 | 50 | 48% | 44% | 85% |
| 22 de marzo de 2007 | 60 | 54% | 42% | 94% |
| 23 de marzo de 2007 | 50 | 55% | 40% | 100% |
"Mi hija estaba afuera esperándome, y estoy seguro de que no le importa lo que acaba de pasar. Ella solo quiere ver Care Bears”, dijo Bryant sonriendo tras aquel partido. "Estoy feliz de que hayamos ganado. Necesitábamos conseguir esta. Solo teníamos que ganar este encuentro y volver a la normalidad, solo por un punto de vista moral. Estamos en un punto en el que todos están un poco golpeados", agregaba el escolta tras romper la racha de 7 derrotas consecutivas que atesoraban.
"Tuve que salir agresivo y afirmarme, solo porque nuestra confianza era un poco inestable", comentó Kobe. “Necesitábamos un juego de ruptura. Y mi trabajo como líder es leer lo que necesitamos como equipo. Y a veces, tomar el control del partido como en este infunde confianza en todos nosotros", aseguró. "Kobe acaba de hacer jugadas de tipo MVP", dijo el novato Brandon Roy.
Otras cosas que sucedieron este día
- Nacen Joel Embiid en 1994 en Yaounde (Camerún) y Blake Griffin en 1989 en Oklahoma City.
- Allan Houston anota 50 puntos en 2003 y lidera la victoria de Knicks contra Bucks.
- Los Angeles Lakers ponen fin a su racha de 19 victorias seguidas (3ª en aquel momento) al perder contra Wizards en el año 2000.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
