La final de la Libertadores tendrá a Boca y Fluminense como los protagonistas de un esperadísimo partido en el Maracaná. ¿Será el día de la ansiada séptima copa Xeneize o el del primer título continental del Fluzao?
Los dos equipos han empatado algunos encuentros en su camino hasta esta final, aunque lo de Boca es de récord con seis encuentros consecutivos que terminaron igualados en la fase final. El cuadro carioca, también invicto en la fase final, igualó ante Argentinos Juniors y contra Inter de Porto Alegre en los partidos de ida de octavos de final y semifinales respectivamente.
La final del torneo, a diferencia de las instancias previas, es a un único partido. Y tiene otras cosas distintas en el reglamento también.
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¿Qué pasa si hay empate en la final de la Libertadores?
La final de la Libertadores es la única instancia del torneo que cuenta con tiempo suplementario en caso de empate.
Si todo termina igualado después de los 90 minutos regulares, se jugarán dos tiempos más de 15 minutos cada uno. El equipo que se imponga en esos 30 minutos extra se quedará con la Libertadores, y si todo sigue empatado, se disputará una tanda de penales en el Maracaná.
Ya hubo tres finales de la Libertadores que se definieron en un tiempo suplementario: la de 1985 que le ganó Peñarol a América de Cali en el alargue del tercer partido (entonces se disputaba un tercer encuentro si habían quedado igualados en puntos tras los dos primeros partidos), la que River le ganó a Boca en 2018 y la final en la que Palmeiras venció a Flamengo en 2021, esta última ya a un único encuentro.
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Además, las finales de 1977 entre Boca y Cruzeiro, 1985 entre Argentinos Juniors y América de Cali, 2008 entre Liga de Quito y Fluminense y 2013 entre Atlético Mineiro y Olimpia tuvieron tiempo suplementario pero el partido no se terminó allí, sino que necesitó de un desempate por penales.
También la final de Atlético Nacional y Olimpia en 1989, la de São Paulo y Newell's Old Boys en 1992, la de Vélez Sarsfield y São Paulo en 1994, la de Palmeiras y Deportivo Cali en 1999, las que Boca le ganó a Palmeiras y Cruz Azul en 2000 y 2001 y la que Once Caldas le ganó a Boca en 2004 se terminaron por penales, aunque estas sin una instancia previa de tiempo suplementario.
En otros casos de las décadas del 60, 70 y 80, las finales quedaron empatadas luego de los dos encuentros iniciales pero se jugó un partido desempate, como estipulaba el reglamento, y este concluyó en los 90 minutos reglamentarios.
Como un dato peculiar, Boca disputó 23 partidos por unas finales de la Libertadores y empató diez de ellos en los 90 minutos iniciales, un porcentaje bastante alto (43.4%).