Denver Nuggets sueña con tener otro año de mucho protagonismo en la NBA tras tres temporadas consecutivas en las que al menos ganó una serie de Playoffs. Para eso el equipo de Colorado ha decidido mantener su estructura, pero a pocos días de jugar su primer partido de pretemporada (el 4 de octubre ante LA Clippers) todavía queda una incógnita interesante a resolver en su quinteto inicial. Es que debido a que Jamal Murray está lesionado y todavía tiene varios meses por delante en su proceso de recuperación, habrá una vacante en el puesto de base titular. Y mucha competencia por ese puesto.
Facundo Campazzo fue el que lo ocupó durante mayor parte del tiempo en la temporada pasada, aprovechando el contexto de su mejor momento como novato y de un Monte Morris que se encontraba con algunos problemas físicos y falto de ritmo. Ahora, de cara a un nuevo curso, parece que la situación puede ser distinta y desde el training camp que los Nuggets están realizando en San Diego, California, todo parece indicar que el que corre con ventaja es Morris, uno de los jugadores con más antigüedad dentro del equipo. Esto en un contexto atípico de training camp para Denver, sin Murray dentro de la cancha y también sin el MVP Nikola Jokic, aun ausente debido a que esta semana nació su primera hija.
Malone deslizó un poco esto en un comentario ante la prensa al hablar sobre lo que le exige a Morris en esta temporada, un mayor protagonismo ante la baja de Murray: "tengo una confianza extrema en la habilidad de Monte. Lo que le digo ahora es que, si es nuestro base titular, debe encontrar su voz para poder comandar al equipo y no ser tan dependiente de Nikola (Jokic) o Will (Barton). Él es el base, él organiza al equipo. Y eso es algo en lo que realmente está tratando de enfocarse en el training camp".
“Hoy fue un día descuidado. Gracias a dios que tenemos un segundo día, es un pequeño recordatorio de lo buenos que son Jamal y Jokic”, expresó Malone algo descontento tras el primer día, algo que puede relacionarse con lo que luego ha sido el crecimiento de Morris en las prácticas según los reportes. Proceso de adaptación.
"Es cuestión de tiempo para que él juegue con agresividad y confianza, que juegue con mentalidad de ataque y que sea más vocal a la hora de manejar al equipo en la cancha. Eso no es fácil, especialmente cuando jugás con el MVP reinante. A veces le digo que le diga a Nikola donde lo quiere ubicado, ese es su trabajo como base, y pienso que él está empezando con eso", agregó Malone.
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Morris tiene claro que esta chance es única en su carrera. "Tendré más oportunidades para hacer cosas en los dos costados de la cancha y jugar mi juego. El entrenador Malone quiere que me suelte y que lleve al equipo, que haga mi juego. Es diferente una vez que lo escuchas de parte del hombre a cargo", dijo Monte, quien en cuatro temporadas en Denver jugó 248 partidos pero solamente 36 como titular, un número no mucho más alto que el de Facundo Campazzo en un año que encima fue reducido en el calendario (75 partidos, siendo titular en 28).
La experiencia que ha tenido Campazzo durante su carrera internacional puede hacer que el cordobés se sienta más cómodo que Morris para ese rol de llevar la primera unidad: su colega es un jugador más de perfil anotador de segunda unidad y deberá acostumbrarse. Será un tema interesante a seguir durante la campaña de los Nuggets, con Malone teniendo varias opciones en las rotaciones para tratar de suplir una baja clave como la de Murray, jugador de calibre all-star que le daba al equipo un nivel superior en ataque al otorgado por Morris o Campazzo. Mientras tanto, la competencia puede ser ideal para potenciar a ellos dos de cara al esperado regreso del canadiense: cuando estén todos Denver contará con una de las media canchas de mayor profundidad de la liga.
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El otro punto de interés en el training camp de Denver está girando alrededor de Will Barton, quien en la práctica del miércoles debió salir (por sus propios medios) tras haberse doblado el tobillo izquierdo. A Barton, un jugador con un amplio historial de lesiones en los últimos años, le colocaron una bota inmovilizadora en ese pie, pero la buena noticia entregada en la jornada pasada es que su inflamación decreció bastante y probablemente le quiten la bota durante el fin de semana.
"No es nada serio, él se siente mejor, pero esto es la pretemporada, no vamos a apurar a nadie porque tenemos algo mucho más grande comenzando contra Phoenix el 20 de octubre", aclaró el entrenador Malone, por lo que seguramente no veremos a Will en los primeros partidos amistosos y habrá más lugar, por ejemplo, para el rookie Bones Hyland o para PJ Dozier.
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