Los Dallas Mavericks jugaron un gran partido en Brooklyn, para vencer a unos disminuidos Nets (sin Kevin Durant ni Kyrie Irving) por 115-98 y seguir recuperando terreno en la Conferencia Oeste. Con la victoria los texanos llegaron a un 16-16 que los tiene noveno en las posiciones, mientras que Brooklyn no pudo aprovechar la derrota de Philadelphia y sigue segundo en el Este (22-13). De esta manera, los neoyorquinos vieron cortada su racha de ocho triunfos en fila.
Más allá de las ausencias de Brooklyn, el partido volvió a mostrar el crecimiento que ha tenido Dallas en el último tiempo. Tras aquel inicio de Fase Regular para el olvido, los de Rick Carlisle han ganado ahora siete de sus últimas nueve presentaciones, luciendo como uno de los conjuntos más sólidos del momento, sobre todo cuando cuentan con su plantel completo (hoy regresó Kristaps Porzingis). Además, una importante reacción de los Mavs luego de verse superados por los 76ers en su compromiso más reciente.
Como se esperaba, el partido comenzó con un tremendo duelo individual entre Luka Doncic y James Harden, con ambos anotando 15 puntos en el primer cuarto. La diferencia fue que mientras los compañeros de La Barba se combinaron para un 3-12 de campo en ese tramo, los de Luka sacaron la cara con 6 tantos de Porzingis, 5 de Tim Hardaway Jr. y un par de bombas de Maxi Kleber y Dorian Finney-Smith. De esa manera, la visita se llevó ese período por 38-26.
Brooklyn logró reducir la distancia a cuatro al llegar al entretiempo (68-64 Mavs), pero Dallas volvió a escaparse en el tercer período. Harden había estado en un nivel brillante en la primera mitad con 25 puntos, pero fue mucho mejor controlado en la segunda: apenas 4 puntos en 14 minutos, con un 1-6 de cancha. Porzingis tuvo un tramo decisivo para que Dallas vuelva a escaparse en el tercer cuarto y los 12 minutos finales ya vieron al visitante en total control de las acciones.
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Para destacar el trabajo defensivo de Dallas en el segundo tiempo, sobre todo teniendo en cuenta que es un equipo que habitualmente muestra muchas deficiencias en ese costado (26° en rating). Aún con las bajas de los Nets, dejar a Harden en un 1-6 de cancha en un partido que hasta entonces era cerrado no es poca cosa y habla también de la evolución que está teniendo el equipo en todos los aspectos.
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Doncic lideró al ganador con 27 puntos, 7 asistencias y 6 rebotes, mientras que Porzingis fue clave en su regreso: 18 puntos y un 7-13 de campo en solo 26 minutos. Los Mavericks han ganado ahora seis de los últimos ocho partidos en los que contaron con sus dos estrellas, mientras que tienen marca de 2-3 en los últimos cinco en los que faltó uno de ellos.
Además de la tarea de Luka y KP, todo Dallas tuvo una noche eficiente en ataque, frente a un Brooklyn demasiado laxo en ese campo. El ganador tuvo a seis jugadores diferentes en doble dígito y no solo anotó 115 puntos, sino que lo hizo lanzando un 52,3% de campo y un 38,9% en triples, con una gran relación de asistencias vs. pérdidas: 23-8.
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En Brooklyn hubo 29 puntos de James Harden, pero nadie más superó los 12 tantos. Como marcamos, el encuentro del ex Houston también hay que dividirlo en dos mitades, siendo absolutamente decisivo en la primera y muy poco certero en la segunda. Harden tampoco pudo hacer jugar a sus compañeros (6 asistencias, 6 pérdidas) y en ese contexto, la ofensiva de los Nets tuvo poco para decir. Los de Nash lanzaron un 40,7% de campo y un 31,8% en triples, en una de sus actuaciones más flojas del último tiempo.
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