La jornada dominical de la NBA comienza con uno de los mejores enfrentamientos que pueden darse en la actualidad, o más bien, uno de los que más pasiones puede levantar sobre una cancha de baloncesto. Dallas Mavericks visitará a los LA Clippers en el Staples Center en un momento sumamente delicado pese a estar dando los primeros pasos en esta fase regular y es que los de Rick Carlisle no conocen todavía lo que es ganar tras perder en sus dos primeros enfrentamientos, uno ante los Suns y el último en el día de Navidad ante los Lakers. En contraste, los Clippers de Ty Lue llegan tras mostrarse como uno de los conjuntos en mejor forma de toda la competición tumbando a sus eternos rivales de la ciudad y a los Nuggets el pasado 25 de diciembre.
Un duelo con mucha historia detrás, la cual comenzó en la burbuja de Disney pues ambos conjuntos se midieron en primera ronda en una de las series más apasionantes del año. Especialmente relacionado con Luka Doncic que en aquella eliminatoria se destapó como una estrella a tener en cuenta en la NBA consiguiendo 31 puntos, 9 rebotes y 8 asistencias de media y un tiro para forzar el sexto partido que pasará a la historia.
No obstante, Doncic y los Mavs no tendrán fácil emular lo acontecido en aquel quinto encuentro pues sus rivales, los Clippers, llegan en el mejor estado de forma posible y con velocidad crucero, promediando 118 puntos por encuentro y siendo hasta el momento el tercer mejor ataque de toda la competición. Un dato que contrasta con el bajo momento de forma de Dallas, cuarta peor defensa en términos de eficiencia hasta el momento (118.4) y que está echando demasiado en falta la presencia de Kristaps Porzingis así como el bajo rendimiento de figuras clave como Tim Hardaway Jr.
Para este partido los Clippers es muy posible que puedan contar con Kawhi Leonard después del espeluznante golpe que recibió de manera fortuita en el último partido tras un choque con Serge Ibaka, mientras que Marcus Morris será baja.
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Dallas, en busca de redención
La serie ante los Clippers en los pasados Playoffs fue el bautismo de Doncic en el mundo NBA por su gran salto adelante que le colocó a ojos de todos como un firme candidato al MVP. Algo que en este arranque de temporada está consiguiendo mantener desde un punto de vista individual, no así colectivo pues en estos dos primeros partidos el esloveno no ha dado con la tecla para que su gran nivel tenga una transferencia directa en los resultados del equipo.
En el primer choque ante los Suns, los de Carlisle tiraron por la borda lo que podría haber sido un triunfo seguro por una serie de errores defensivos en las últimas jugadas, confirmando que los problemas en el clutch siguen ahí, mientras que ante los Lakers estos se vieron sobrepasados prácticamente desde el inicio y sumaron la segunda derrota del curso.
La mejora defensiva ante uno de los equipos más sólidos en este inicio parece improbable dado el potencial ofensivo de estos, pero la posibilidad de empezar el curso con un 0-3 planea sobre las cabezas de los Mavs como una losa a tener en cuenta y que deberían evitar a toda costa.
“Es un año diferente, pero es lo mismo. Son partidos de la NBA difíciles y un gran desafío cada noche. Para ganar, hay que estar muy unidos y jugar con un gran entusiasmo por competir entre sí", dijo el entrenador de los Mavs.
"Entiendo que el mundo está en un momento extraño y tenemos algunas circunstancias diferentes en torno a cómo estamos jugando, cómo estamos compitiendo", dijo Dwight Powell. “Pero al final del día, tenemos la oportunidad de jugar el juego que amamos. Para competir por puestos en los playoffs. Para competir por un campeonato".
Si los Mavericks quieren realmente competir por un campeonato aprovechando la juventud y el talento de Doncic deberán convertirse en un equipo sólido atrás que marque el tempo de los partidos y no dependa únicamente de la producción ofensiva de su estrella. Prueba de fuego para los texanos en su camino a los Playoffs.
Cuentas pendientes para Clippers y George
Da la impresión en este arranque de temporada regular que los californianos están tratando de demostrar que lo sucedido en el pasado curso fue una excepción, una mancha negra en su historial y que este 2021 va a ser verdaderamente su año. En los dos encuentros disputados ha saldado cuentas con dos de los rivales que condicionaron el relato de su temporada como fueron los Lakers por su evidente rivalidad geográfica y competitiva y después ante Nuggets, equipo que los sacó de los Playoffs pese a la ventaja de 3-1 de la que disponían y que evidenció los problemas que los Clippers tenían.
El equipo entrenado por Ty Lue ha dado la impresión en estos dos primeros compromisos de ser un grupo mucho más compacto, en todos los sentidos. Un equipo renovado y con la sensación de ser finalmente un conjunto de jugadores unidos para una causa, que comparten objetivos y funcionan en sintonía.
El que más se está beneficiando de este nuevo ecosistema es nada menos que Paul George, uno de los más señalados en el debacle sufrido en Disney por su bajo rendimiento en los momentos clave, y que ahora en la nueva temporada ha ofrecido una versión completamente renovada. Con 28 puntos de media y un 65% en tiros de campo y 58% en triples, el escolta de los Clippers se ha erigido como la gran referencia ofensiva del equipo y rindiendo como se esperaba de este All-Star. George ha aprovechado sus oportunidades para producir ofensivamente sin apenas consumir balón y percutiendo desde la larga distancia como venía siendo habitual.
Enfrente tendrá hoy a unos Mavs que llegan a Los Ángeles con malas sensaciones en defensa y que podría ser el contexto adecuado para una exhibición del californiano. De hecho, fue ante Dallas en Playoffs donde comenzó a descender su nivel respecto a la temporada regular, promediando un 35% en tiros de campo y un 27% en triples en el global de la serie.
Cómo ver el Mavs vs. Clippers
El partido se jugará a las 14:30 de CDMX y 17:30 de Argentina y se podrá seguir por el NBA League Pass, la plataforma oficial de la NBA para ver todos los partidos de la temporada, en vivo y on demand. Click aquí para suscribirte.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.