Los Dallas Mavericks tuvieron una demostración ofensiva espectacular y vencieron a los New Orleans Pelicans por 143-130, en un partido en el que comenzaron abajo en el marcador, para luego tomar el control durante el segundo cuarto para no volver a cederlo por el resto de la noche. Cierre sólido y sin sobresaltos para los texanos, que siguen avanzando en su reacción en esta 2020-2021.
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Con esta victoria Dallas ha ganado ahora cinco de sus últimos seis compromisos y aquel muy mal arranque de la Fase Regular empieza a quedar atrás. Claro, el equipo está completo luego de un buen tiempo y la diferencia con los días de extensos reportes de lesionados son enormes. Los Mavericks mejoraron ahora su récord a 13-14 en el certamen, mientras que los Pelicans cayeron a un irregular 11-14 que los sigue teniendo lejos de las posiciones de Playoffs (o Play-In) en el Oeste.
La historia de la noche pasó por la producción ofensiva del ganador y si bien todo el trabajo colectivo fue excelente, hubo un par de nombres que sobresalieron por encima del resto. La fiesta de triples la abrió Kristaps Porzingis con cuatro conversiones tempraneras en el primer cuarto y aunque el letón bajó su rendimiento durante un buen tramo, reapareció en la segunda mitad para terminar de coronar una gran actuación de su parte.
KP acabó con 36 puntos, 7 rebotes, un 13-21 de campo y un 8-13 en triples. Se trató de su máxima de puntos en la 2020-2021 y de su cuarta anotación más alta desde que viste la casaca de los Mavs. New Orleans jamás encontró respuestas para su juego de pick and pop y de apertura a 7 metros del aro. Esos tiros estuvieron disponibles durante casi toda la noche y Porzingis metió mucho más de lo que falló.
Cuando Porzingis tiene rendimientos de este tipo, la ofensiva de Dallas carbura a niveles históricos. Tal como lo hizo en la 2019-2020, cuando acabaron con el mejor rating ofensivo de todos los tiempos. Eso se explica no solo por lo que genera el propio pivote con el balón, sino por la generación de espacios y concentración defensiva que atrae. La famosa gravedad del tirador.
Claro que la gran noche de Dallas no vino solo por parte del letón. De hecho, ni siquiera fue el máximo anotador del equipo. Ese honor le correspondió a Luka Doncic, quien tuvo el que seguramente haya sido su mejor partido de la temporada, con una línea estadística que lo dice todo: 43 puntos, 12 asistencias, 8 rebotes, 16-29 de campo, 5-8 en triples... hasta sumó un robo y una tapa.
Has Dirk been at shooting practice? 🤔
— Dallas Mavericks (@dallasmavs) February 13, 2021
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Luka hizo absolutamente de todo y si decimos que la defensa de New Orleans no tuvo respuestas para el juego perimetral de Porzingis, mucho menos las tuvo para frenar a Doncic, ya sea a ocho metros del aro o en sus penetraciones. Al igual que el equipo, el ex Real Madrid está retomando su mejor versión y eso obviamente es una muy mala noticia para el resto de la liga.
Más allá de los nombres, el partido de los Mavs también terminó siendo histórico desde lo colectivo: los 25 triples que convirtieron son una nueva marca de franquicia, superando los 24 que habían sumado en el 2019 en una victoria ante Golden State.
Maxi set the new 𝕗𝕣𝕒𝕟𝕔𝕙𝕚𝕤𝕖 𝕣𝕖𝕔𝕠𝕣𝕕 for made 3-pointers in a game with this bucket pic.twitter.com/PIirJE82ix
— Dallas Mavericks (@dallasmavs) February 13, 2021
Dallas anotó 143 puntos, lanzó un 58% de campo, un 55,6% en triples y sumó 30 asistencias contra solo 6 pérdidas. Más no se puede pedir de una ofensiva.
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Si bien nadie va a sacarle mérito a lo hecho por los Mavericks esta noche, también hay que hablar de otra actuación flojísima de New Orleans en defensa. No importa cuán encendido esté el rival... números semejantes solo pueden venir de la mano de un rendimiento muy pobre en el campo propio y tal fue el caso de los Pelicans. Lo más preocupante es que venían de recibir 129 puntos en su derrota ante Chicago, con... ¡25 triples permitidos! Mismas cifras de esta noche. Además, en aquella ocasión hubo 76 tantos combinados entre dos jugadores (LaVine y White), mientras que Doncic y Porzingis sumaron 82.
Hubo un momento hasta hace algunos días donde los Pelicans parecían haber hecho un click en su rendimiento, especialmente en defensa. Bueno... todo eso se ha ido a la basura en sus últimas dos presentaciones, donde han recibido números históricos y que deben seguir poniendo en alerta a Stan Van Gundy y compañía.
Dentro de ese contexto, hubo un par de figuras para destacar en New Orleans desde su tarea en ataque: Zion Williamson brilló con 36 puntos y un sensacional 14-15 de campo, aunque solo bajó 2 rebotes en 36 minutos (algo que sigue siendo un defecto importante en su caso). Además Brandon Ingram terminó con 28 unidades, junto a 5 rebotes y 5 asistencias.
Las opiniones aquí expresadas no reflejan necesariamente aquellas de la NBA o sus organizaciones.
