No ha sido este un gran comienzo de año para Boca. Y ya con el calendario bordeando mayo, tampoco puede hablarse demasiado de que sea un "comienzo". En la Copa de la Liga, sin ir más lejos, ya se acerca la etapa decisiva, la de los cuartos de final. Y con la Libertadores sí poco avanzada, el certamen doméstico es el que permite establecer la vara y hacer una evaluación más profunda de lo hecho hasta aquí por el equipo de Sebastián Battaglia.
Boca tiene muchos problemas, está a la vista. Las lesiones lo han diezmado, es cierto, pero tampoco pueden funcionar como una excusa para todos los males. Entre los varios que son evidentes, uno que no ha tenido solución y que se repite una fecha tras otra es el del pésimo control del equipo de los resultados a favor.
En nueve de los 11 partidos (el 82%) de la Copa de la Liga 2022, el Xeneize marcó antes que su rival. Ningún equipo abrió el marcador más veces que Boca (Estudiantes y Racing lo hicieron en 8 ocasiones). Pero en más de la mitad (cinco de ellos) sus rivales se lo terminaron empatando. Y cuatro fueron en la Bombonera. Solo una vez Boca comenzó perdiendo (ante Huracán) y no pudo recuperarse: fue la única derrota sufrida hasta el momento.
Los partidos que Boca comenzó ganando... Y no ganó
Fecha | Rival | Condición | Resultado |
---|---|---|---|
1 | Colón | Local | 1-1 |
4 | Independiente | Visitante | 2-2 |
8 | Arsenal | Local | 2-2 |
10 | Lanús | Local | 1-1 |
11 | Godoy Cruz | Local | 1-1 |
En todo el campeonato, además, los de Battaglia marcaron 11 goles que le dieron una transitoria ventaja, pero permitieron 7 tantos rivales que significaron el empate: 64% de las veces luego de haberse puesto arriba le igualaron.
Si los números se reducen a los últimos 15 minutos del partido, Boca perdió cuatro puntos en ese lapso, mientras que no ganó ninguno desnivelando en el último tramo del juego. Esa diferencia entre las unidades resignadas y las obtenidas en los cierres de los partidos (-4 en el caso del conjunto auriazul) es la peor entre los 28 equipos del campeonato.
Boca metió más goles que todos sus rivales en la primera hora de juego. Allí ha sido mejor que sus contrincantes con un saldo de 11 goles a favor y 3 en contra. La prueba del desmoronamiento viene en lo que sigue: del minuto 60 al 90 el saldo es de 2 goles propios y 7 ajenos.
Con todo lo que le cuesta elaborar juego al equipo, es un pecado capital no saber cuidar las ventajas. Aun sin fluidez en la maquinaria, a Boca le han sobrado las oportunidades de ganar y ha hecho el primer gol para conseguirlo en casi todos sus partidos. Pero se cae a pedazos a la hora de defender las ventajas y lo puede pagar aun más caro que con la pérdida de puntos: el ciclo del DT está cada vez más en la mira.