El March Madness no solo es un torneo muy entretenido en sí mismo, sino que además presenta una oportunidad ideal para empezar a conocer a las próximas estrellas de la NBA. El 2024 no debería ser la excepción: varios protagonistas del Torneo NCAA de este año estarán pronto escuchando su nombre entre los primeros picks del próximo Draft.
La perspectiva está puesta exclusivamente en aquellos talentos que se proyectan como posibles estrellas NBA. En lo que refiere a la NCAA, otros nombres destacan, como el del gigante de Purdue, Zach Edey; el base tirador de North Carolina, RJ Davis; o el salvaje defensor de Houston, Jamal Shead. Sin embargo, por más estelares que sean a nivel universitario, ninguno de ellos cuenta con el mejor perfil NBA, por lo que quedan excluidos de este repaso.
Donovan Clingan - Interior, Connecticut
En términos de proyección NBA, Clingan es el mejor interior del baloncesto NCAA. Se trata de una mole de 2,18 metros y más de 120 kilos, que ya ganó el campeonato nacional con Connecticut en 2023 -en aquel caso como suplente del MVP Adama Sanogo- y que hoy, en su segundo año, es titular y pieza fundamental del máximo favorito al título.
Clingan es un interior de vieja escuela. No es un gran tirador ni tiene la capacidad de salto de algunos de sus contemporáneos, pero domina las dos pinturas con su presencia física, movilidad y buen toque. Sus estadísticas pueden no ser tan llamativas -12,5 puntos, 7,2 rebotes y 2,3 tapones- pero hay que tener en cuenta que juega en unos Huskies con al menos siete jugadores que se destacarían en cualquier equipo de la competencia. Además, consigue esos números en una media de apenas 21,9 minutos por partido.
Para los fanáticos de las estadísticas avanzadas, Clingan tiene el segundo mejor Player Efficiency Rating (PER) de la NCAA, el tercer mejor Box Plus/Minus (BPM) y el cuarto mejor rating ofensivo.
Stephon Castle - Alero, Connecticut
Castle es compañero de Clingan en UConn y otra razón fundamental por la que los Huskies son grandes favoritos. En su caso, se trata de un alero novato de 1,98m y muchísima potencia física, que destaca por sus dotes defensivos y como pasador. De hecho, Connecticut muchas veces lo utiliza en un rol de base -2,9 asistencias en 26,8 minutos-, algo especialmente destacado en el que probablemente sea el equipo con más talento pasador de toda la NCAA -se ubican 4° en asistencias por partido, a pesar de jugar con uno de los ritmos más bajos de la competencia-.
Castle no destaca como anotador ni tirador, pero impacta en el resto del juego, tanto en defensa como en ataque. Su madurez va más allá de sus 19 años y eso, sumado a su excelente perfil físico y atlético, seguramente lo llevará a ser un pick Top 10 del próximo Draft.
Cody Williams - Alero, Colorado
El hermano de Jalen Williams, estrella de Oklahoma City Thunder, es otro de los aleros novatos que está brillando en esta temporada. Cody es más alto que el mencionado Castle -mide 2,03m.- aunque menos potente y explosivo.
Lo que destaca de Williams en esta temporada es su eficacia. Lanza un 57% de campo y 42% en triples, aunque hay algunas dudas sobre cuán trasladable a la NBA es ese porcentaje en tiros exteriores -intenta menos de 2 triples por partido, una marca muy baja para un alero-.
Lo que sí luce como una fija para su futuro es su habilidad para crear con el balón en las manos, especialmente aprovechando su tranco largo para recibir en el perímetro y atacar la pintura rival. Dato no menor: lanza un asombroso 75% de campo en disparos cercanos al aro.
Los jugadores por arriba de 2 metros con tiro, habilidad con el balón y versatilidad defensiva, siempre son de los perfiles más valorados en el Draft NBA y Williams no debería ser la excepción.
Ja'Kobe Walter - Escolta, Baylor
Seguimos con los perimetrales novatos, pero en este caso hablamos de un escolta, netamente tirador como Ja'Kobe Walter, titular en Baylor -otro equipo con aspiraciones de título-.
Walter, de 1,96m de estatura, no es un dotado a la hora de generar juego desde el drible, pero es uno de los tiradores más peligrosos de la NCAA cuando está encendido. Su 34% en triples es mediocre, pero lo hace tomando más de 6 intentos por partido y con muchos de ellos de alta dificultad, lanzando en movimiento.
Si de 3&D clásicos se habla, Walter tiene el potencial para ser de los mejores de esta clase 2024.
Reed Sheppard - Base, Kentucky
De un novato que está entre los mejores tiradores de la competencia, al que sin dudas se queda con el primer lugar de ese grupo. Sheppard es un base de 1,90m que, a pesar de salir como suplente en Kentucky, es el jugador más confiable y destacado del equipo de John Calipari.
Los números de Sheppard son una locura. Lanza un ¡53% en triples! y un 54% de campo, en camino a sus 12,8 puntos, 4,5 asistencias y 4,3 rebotes por partido. Y como si fuera poco, a eso le suma 2,5 robos y 0,7 tapones de media.
Sheppard no tiene ese instinto asesino de algunos otros grandes anotadores, pero es extremadamente eficiente y productivo en ambos costados del campo. Su rango de cara al Draft es variado, pero podría ser elegido tan alto como con un segundo o tercer pick.
Rob Dillingham - Base, Kentucky
Mucho de lo mencionado con Sheppard le cabe a Dillingham, otro base novato de Kentucky que también sale como suplente -sí, Calipari utiliza a sus dos mejores talentos desde la segunda unidad- pero se las arregla para ser uno de los jugadores más dinámicos y espectaculares de toda la NCAA.
Si Sheppard es hielo, Dillingham es fuego. Su talento para jugar con el balón en sus manos es inagotable, ya sea para penetrar y definir entre los gigantes, lanzar en movimiento o, en menor medida, asistir a sus compañeros. Cada vez que Dillingham tiene la bola, hay alerta de highlight.
El problema con el base de Kentucky es que, a diferencia de Sheppard, su aporte es netamente ofensivo, dando enormes ventajas en defensa y desde un punto de vista físico. Aun así, muchas proyecciones lo tienen en el Top 5 del próximo Draft.
Dalton Knecht - Alero, Tennessee
Probablemente haya un solo jugador en toda la NCAA más agresivo y decidido con el balón que Rob Dillingham: Dalton Knecht, alero de Tennessee, quien promedió la barbaridad de 25,5 puntos en los 18 partidos del durísimo SEC -quizá la mejor conferencia del certamen-.
Knecht es bastante más veterano que el resto de los jugadores mencionados -pronto a cumplir 23 años- pero su explosión en esta temporada ha sido una de las grandes historias de la competencia. Se trata de un alero incansable, de 1,98m de estatura, que se destaca principalmente por su tiro exterior y movimiento sin balón, pero que también demuestra una enorme habilidad para atacar el aro y terminar con potencia entre los grandes.
Aunque rara vez pasa la bola, ver jugar al frenético Knecht es una de las propuestas más entretenidas que tiene la NCAA y su March Madness 2024.